La bodega Santa Irene es la culminación del sueño. Daniel Anastasis y su esposa Theoni reanudaro en 2015 el antiguo oficio de cultivar vides y elaborar vino en Farmakas, avivando de nuevo la vida en la montaña.
La bodega Santa Irene gestiona más de 15 hectáreas de viñedos en las montañas de Farmakas, que alcanzan una altitud de 1.350 metros. Predomina la variedad tinta local «Black Ampeli», mientras que la variedad blanca local es más pequeña. Viñedos con una edad media de 150 años perfectamente adaptados al «Terroir» (terreno) rocoso y montañoso de Farmakas. La combinación única de los viñedos viejos con la elevada altitud y la especial composición del suelo, junto con las técnicas tradicionales de vinificación y viticultura, dan como resultado la calidad de unos vinos distintos y complejos. La Bodega Santa Irene produce siete etiquetas de vino que han recibido premios en concursos de vinos locales e internacionales. La bodega ofrece visitas guiadas, catas de vino y platos locales en el restaurante de la bodega.
Esta bodega es una iniciativa notable que utiliza variedades de uva locales para producir vino mediante tecnologías innovadoras. Dentro de las instalaciones de la bodega funciona el restaurante Ierambelos, que combina cocina de fusión y tradicional. Este negocio local crea un impacto positivo en varios campos, como:
Medio ambiente y patrimonio cultural – revivir la variedad tradicional chipriota, Mavro Ampelisimo, descuidada e infravalorada, así como regenerar y preservar los viñedos tradicionales de la zona de Farmakas, que tienen siglos de vida y forman parte del patrimonio cultural de Chipre.
Sociedad – ha impulsado significativamente la actividad empresarial en una zona rural y remota, creando puestos de trabajo sostenibles y de calidad. Al mismo tiempo, es un buen ejemplo, especialmente para los jóvenes, para dedicarse a la industria.
Turismo – la bodega Santa Irene y su restaurante se consideran un producto turístico de calidad que ofrece experiencias auténticas basadas en la gastronomía local.
La calidad y autenticidad de la experiencia constituyen un factor crítico de éxito para la bodega. La calidad de la comida y el vino en combinación con el auténtico paisaje chipriota forman parte de la experiencia. Los visitantes pueden hacer un recorrido por la bodega, así como oler y degustar los exquisitos vinos galardonados que se producen en ella. En el restaurante Ierambelos, situado en la zona de la bodega, los visitantes pueden degustar cocina de fusión preparada con ingredientes locales. En el restaurante también se pueden organizar eventos memorables como fiestas de cumpleaños, bautizos, etc.



Project Number: 2022-1-ES01-KA220-VET-000086688